FERNANDO RODRÍGUEZ-AVIAL AZCUNAGA

Don Fernando nació en Madrid, en el mes de Julio de 1907. Preparó el examen de ingreso en la Academia Hacar, y entre sus compañeros destacan dos jugadores del Real Madrid de los años 20 y 30: Juanito Monjardín y Pedro Escobal. El primero de ellos falleció en un accidente de tráfico en el año 1950. En cuanto a Pedro Escobal, emigró a los Estados Unidos. Allí montó un pequeño negocio con el que sacó adelante a su familia, y un hijo suyo ingresó en la NASA, siendo uno de los principales ingenieros del proyecto Apolo XIII.

El señor Rodríguez-Avial comenzó la carrera de ingeniero industrial en la Escuela de Madrid, el año 1924, y la terminó en 1930. Al terminar los estudios empezó a enseñar Resistencia de Materiales, a las órdenes del catedrático de la asignatura, don Gervasio de Artíñano y Galdácano, a quien recuerda con simpatía y cariño. Una vez que éste se jubiló, don Fernando le relevó en la cátedra, donde permaneció hasta 1977. De la relación con las escuelas de Barcelona y Bilbao recuerda especialmente a D. Joaquín Nebreda de Miguel (catedrático en Barcelona) y a
D. Gregorio Ras de Oliva (Bilbao), catedráticos como él, de Elasticidad y Resistencia de Materiales.

La labor bibliográfica de nuestro protagonista no ha sido grande, pero sí muy acertada. Sus tres publicaciones más importantes son las siguientes, y a pesar de haber sido escritas hace más de 25-30 años siguen utilizándose.

  • Resistencia de Materiales, tomos I y II , ETSII de Madrid, 1977 (2ª edición).
  • Construcciones Metálicas, Librería Editorial Bellisco, Madrid 1987 (6ª edición).
  • Problemas resueltos de resistencia de materiales (muy usado por los actuales alumnos de Tercer curso), Librería Editorial Bellisco, 1989 (3ª edición).

Estas tres obras, a pesar de haber sido escritas hace más de 20 años, siguen utilizándose habitualmente.

En el año 1963, Fernando Rodríguez-Avial ocupó la dirección de la Escuela, cargo que desempeñó por tres años. Acabado este tiempo, el claustro de profesores su reunió y decidió elegirle por otros tres años más.

Durante su etapa como director intentó llevar la Dirección como se lleva la dirección de una empresa. Recuerda la etapa 1963-1969 agradablemente, sin grandes complicaciones. Sólo al final, en 1968-69, se sintieron los influjos del “Mayo Francés” en algunas manifestaciones de pequeña importancia.

Paralelamente a la labor universitaria, trabajó don Fernando en la empresa privada, concretamente en la Sociedad Comercial de Hierros, que se dedicaba a las construcciones metálicas. Llegó a ser Director Técnico, y Director Gerente.

Al igual que don Antonio Colino, Ángel Torán, Pedro Puig Adam, y tantos otros, pasó la Guerra dentro de la Escuela.