INTRODUCCIÓN AL MUSEO DE LA ESCUELA TÉCNICA SUPERIOR DE INGENIEROS INDUSTRIALES DE LA UNIVERSIDAD POLITÉCNICA DE MADRID
Desde la Edad de Piedra, cuando los seres humanos éramos nómadas, existe la Técnica, esta se define como el conjunto de procedimientos o recursos que se usan en un arte, en una ciencia o en una actividad determinada, que se adquieren por medio de su práctica y requieren habilidad. Con ella, dominamos el fuego, creamos las herramientas de piedra, nos defendimos con nuevas armas y nos cubrimos con atuendos. Luego vino el entorno, la agricultura y la ganadería. Llegaron los metales, el cobre, más tarde el bronce, y finalmente, el hierro. El hierro hizo más eficiente la construcción, la agricultura, la ganadería y la minería, lo que permitió a las personas dedicar más tiempo a otra actividades. Surgió la escritura, la moneda, las sociedades, y las grandes civilizaciones. Los sistemas de transporte, suministro y producción de bienes se perfeccionan. Los ciudadanos se especializan en las nuevas sociedades, organizándose en profesiones. Los artesanos son una de estas profesiones, se especializan en aplicar, desarrollar y transmitir la Técnica a las siguientes generaciones.
No es hasta el desarrollo de la Ciencia, concretamente de la Física y las Matemáticas, en el siglo XVIII, gracias a científicos como Newton, cuando surge el concepto de Ingeniero como aquel que aplica las matemáticas y la ciencia. La Técnica empezó a tener una reflexión científica y dejo de ser una herramienta para el oficio de artesanos reunidos en gremios medievales, para ser uno de los motores de cambio de nuestra sociedad.
Con la Ingeniería llega la máquina de vapor de James Watt, un invento que cambiaría el mundo. La máquina se instala en un carro y se crea el primer ferrocarril, y en una embarcación y aparece el barco de vapor. La agricultura, la ganadería, la minería, los trasportes, en general todos los sistemas se hicieron más eficientes, la Revolución Industrial había llegado.
España, aunque más tarde, también experimenta el desarrollo de la Industria. Se hace patente la necesidad de formar Ingenieros especializados en la Industria, así que, el Ministerio de Instrucción y Obras Públicas, por Real Decreto, en 1850, ordena la creación de la carrera de Ingeniero Industrial y el comienzo de la docencia en el Real Instituto Industrial en Madrid, a la que le seguirían Escuelas auxiliares en otras regiones de España. Más tarde, la docencia pasaría a la Escuela de Ingenieros Industriales, en el Palacio de las Artes y la Industria de la Castellana, en la que se siguen formando los profesionales del mañana.
Los Ingenieros Industriales desarrollaron la Industria en el País Vasco y Cataluña, consiguiendo consolidar a España como país industrializado. También fueron los encargados de mantener la Industria en la etapa de la autarquía instaurada tras la Guerra Civil. A pesar de ello, consiguen el desarrollo del tren Talgo y la creación de la empresa automóviles SEAT. Y con el Plan Nacional de Estabilización Económica, de finales de los 50, y la apertura de la economía española, la Industria española se disparó, cambiando para siempre nuestro país.
Actualmente, los Ingenieros Industriales siguen enfrentándose a grandes retos como el acceso a las TIC, la industria 4.0., frenar el cambio climático, la producción de energías renovables, etc. Pero para poder entender nuestro panorama actual y el futuro que nos espera, conviene revisar nuestro pasado.
Con este propósito, surge la iniciativa del Museo de la ETSII. Una plataforma que pretende realzar el patrimonio de los Ingenieros Industriales y nuestra Escuela, a través de exposiciones físicas y virtuales, entrevistas, fotografías y contenido audiovisual. Todo ello, para que nuestro patrimonio no sea olvidado.